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Ático en el centro de Bilbao

En este ático, se pedía un espacio abierto compartiendo zonas de uso diario como la cocina, comedor y salón. Solo quedan privatizados el baño y la habitación. En esta última y para ganar espacio, es el propio armario el que cierra la estancia ( sin tabaquería añadida) y en el caso del baño, el tabique no se sube hasta el techo para así dejar pasar la luz natural hasta la cocina y de esta manera potenciar la sensación de aperturismo a toda la vivienda. En el diseño del proyecto se le ha dado mucha importancia a la cuestión del almacenamiento.